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EE.UU. Y EL REINO UNIDO BOMBARDEAN NUEVAMENTE A YEMEN

Este lunes, Estados Unidos y el Reino Unido llevaron a cabo bombardeos conjuntos contra posiciones de los rebeldes hutíes en Yemen, marcando la segunda operación coordinada entre ambas naciones contra este grupo, según informó el Pentágono en un comunicado.

Uno de los principales objetivos de la operación fue la destrucción de un almacén subterráneo utilizado por los hutíes para almacenar misiles destinados a ataques contra embarcaciones en el mar Rojo. Además, los bombardeos se dirigieron hacia otras ubicaciones hutíes utilizadas para la vigilancia aérea, detalló el Pentágono.

En total, la operación resultó en la destrucción de ocho objetivos. El comunicado oficial no proporcionó información sobre posibles bajas durante el ataque.

Es importante destacar que Estados Unidos y el Reino Unido contaron con el respaldo de Australia, Baréin, Canadá y los Países Bajos en la ejecución de estos ataques, según lo anunciaron sus respectivos gobiernos.

El presidente estadounidense, Joe Biden, mantuvo una conversación telefónica con el primer ministro británico, Rishi Sunak, abordando diversos temas, entre ellos la seguridad en el mar Rojo, según informó la Casa Blanca.

Este nuevo ataque se llevó a cabo diez días después de que Estados Unidos y el Reino Unido realizaran un primer ataque conjunto contra 60 objetivos en Yemen relacionados con los hutíes. Este acto representó la primera gran medida de represalia contra los insurgentes debido a los ataques ocurridos en el mar Rojo.

Desde el primer ataque conjunto, Estados Unidos ha llevado a cabo ataques por separado contra los hutíes, muchos de ellos dirigidos a misiles que, según afirmaciones de Washington, representaban una amenaza inminente para las embarcaciones en el mar Rojo.

Los hutíes, una milicia respaldada por Irán que controla extensas áreas en Yemen, han perpetrado varios ataques en el mar Rojo y el estrecho de Bab al Mandeb contra barcos que, según sus afirmaciones, están vinculados a Israel o se dirigen hacia ese país.

Los hutíes alegan que sus ataques son una respuesta a la ofensiva que Israel lanzó sobre la Franja de Gaza después del ataque del grupo palestino Hamás el 7 de octubre. Esta escalada de violencia ha generado preocupaciones sobre la posibilidad de que la guerra en Gaza, que ha cobrado la vida de 25,000 personas, se intensifique y se convierta en un conflicto regional.

Adicionalmente, los ataques llevados a cabo por los hutíes podrían tener un impacto significativo en la economía mundial, ya que cerca del 15 % del comercio marítimo global circula a través del mar Rojo.

En el ámbito diplomático, la semana pasada, Estados Unidos intentó obstaculizar las fuentes de financiación de los hutíes al designarlos como “terroristas”, una medida que el grupo consideró como un “honor”.

Los hutíes son parte integral del denominado “Eje de la Resistencia”, una coalición dirigida por Irán con el objetivo de ampliar su influencia en la región de Oriente Medio.