EL CANAL DE PANAMÁ VIVE SU “PEOR CRISIS”

La situación crítica en el Canal de Panamá se debe a una disminución en la cantidad de agua disponible para el funcionamiento de la vía acuática. Esta disminución ha obligado a reducir la velocidad de paso de los barcos ya tomar medidas de conservación del agua.

El Canal de Panamá, que conecta el océano Atlántico con el océano Pacífico, depende en gran medida de las lluvias y los ríos para mantener su nivel de agua adecuado para la navegación de los barcos. La crisis actual se considera la peor que ha enfrentado el canal en este aspecto.

En una entrevista con EFE el ministro Arístides Royo, responsable de los asuntos del canal, expresó su preocupación por esta situación y destacó la importancia de tomar medidas para abordar esta crisis y garantizar la operación continua y eficiente del canal, que es vital para el comercio internacional.

El Canal de Panamá ha tomado medidas para enfrentar la crisis de agua reduciendo el número de buques que cruzan diariamente, pasando de un máximo de 38 a 32 buques por día. También se ha reducido gradualmente el calado, que es la profundidad de agua disponible para los barcos, hasta llegar a 44 pies en la actualidad.

Estas medidas se implementaron a partir del 31 de julio y buscan preservar el nivel de agua necesario para la operación segura de la vía acuática. Este Canal es una ruta vital para el comercio mundial, moviendo anualmente entre 500 y 510 millones de toneladas de carga, por lo que es crucial garantizar su funcionamiento incluso en tiempos de crisis de agua.

“Es la peor (crisis) porque los cuatro buques menos no se nos había tenido que producir, sí se nos había producido ya la disminución del calado”, lo que obliga a los barcos a pasar con menos carga, afirmó el Ministro para Asuntos del Canal.

El fenómeno del Niño no es nuevo y ha impactado en el Canal de Panamá en el pasado. Sin embargo, en esta ocasión, su impacto no ha sido muy notorio en comparación con eventos anteriores. A nivel mundial, ha habido cierta preocupación y reacciones, como la publicación del presidente colombiano Gustavo Petro en redes sociales, donde mencionó que “la sequía cierra el canal de Panamá” y compartió información sobre la situación de más de 200 embarcaciones atrapadas a ambos lados. de la vía fluvial.

Aunque la sequía ha generado desafíos en la operación del canal, las medidas tomadas por las autoridades panameñas buscan garantizar su funcionamiento seguro y continuo.

Aún con esto, las autoridades están tomando medidas para abordar esta preocupación, como la realización de estudios en cuencas vecinas, como el Río Indio, para evaluar la posibilidad de proyectos que aumenten el suministro de agua al canal. También se están considerando otras opciones para aprovechar el agua de los ríos que fluyen hacia el mar y que podrían contribuir al abastecimiento del canal. Estos esfuerzos buscan garantizar la continuidad de las operaciones del Canal de Panamá en medio de las condiciones de sequía.