COREA DEL SUR LANZARÁ UN SATÉLITE ESPÍA EL 30 DE NOVIEMBRE
Corea del Sur anunció el lunes sus planes de lanzar su primer satélite espía construido en el país a finales de este mes. El objetivo principal de este satélite es monitorear de cerca de las actividades de su vecino, Corea del Norte, que ha estado expandiendo su arsenal de armas nucleares en los últimos años.
La noticia surgió después de que Corea del Norte no cumpliera su promesa de realizar un tercer intento de lanzar su propio satélite de reconocimiento en octubre, posiblemente debido a problemas técnicos.
El portavoz del Ministerio de Defensa de Corea del Sur, Jeon Ha Gyu, informó a los periodistas que el primer satélite espía militar del país será lanzado desde la Base de la Fuerza Aérea Vandenberg en California el 30 de noviembre. Esta iniciativa representa un paso significativo para Corea del Sur en el ámbito espacial, ya que les permitirá obtener información crucial para la seguridad nacional y mantenerse al tanto de las actividades de Corea del Norte.
Según información de la agencia AP, el satélite será transportado por el cohete Falcon 9 de SpaceX. Según un contrato con SpaceX, Corea del Sur planea lanzar cuatro satélites espías más para 2025, según la Administración del Programa de Adquisiciones de Defensa de Corea del Sur.
La adquisición de sus propios satélites de reconocimiento militar otorgaría a Corea del Sur un sistema de vigilancia espacial independiente, permitiéndole monitorizar las actividades de Corea del Norte casi en tiempo real.
Actualmente, Corea del Sur depende de satélites espías estadounidenses para este propósito, lo que limita su acceso a información sensible debido a las prioridades estratégicas de Estados Unidos.
Operando en conjunto con el sistema de tres ejes de Corea del Sur, que incluye un enfoque en el ataque preventivo, defensa antimisiles y activos de represalia, la capacidad de defensa del país se vería significativamente reforzada.
A pesar de que los satélites espías estadounidenses ofrecen imágenes de mayor resolución, estos no siempre se alinean con los objetivos específicos de seguridad de Corea del Sur. La posesión de sus propios satélites permitiría a Corea del Sur tener un control más directo y detallado sobre su seguridad nacional.
Los ambiciosos planes de acumulación de armas anunciados por el líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, incluyen la posesión de satélites espías, misiles balísticos intercontinentales móviles, submarinos de propulsión nuclear, armas hipersónicas y misiles con ojivas múltiples para hacer frente a las crecientes amenazas militares estadounidenses.
Se cree que Corea del Norte está buscando tecnologías armamentísticas sofisticadas de Rusia para modernizar sus programas de armas, a cambio de suministrar municiones, cohetes y otros equipos militares para la guerra de Rusia en Ucrania. A pesar de los lanzamientos fallidos, el satélite norcoreano aún sería capaz de identificar grandes objetivos como buques de guerra, lo que podría ser militarmente útil para Corea del Norte. Tanto Corea del Sur como Estados Unidos están atentos a estos desarrollos y están tomando medidas para fortalecer su propia capacidad de vigilancia y defensa.
