EL EX SECRETARIO DE LA DEFENSA NACIONAL ASEGURÓ QUE SU DETENCIÓN EN ESTADOS UNIDOS ES PARTE DE UN PLAN PARA AFECTAR A MÉXICO.
Salvador Cienfuegos Zepeda, quien fungió como secretario de la Defensa durante el mandato de Enrique Peña Nieto, afirmó que su arresto no fue dirigido hacia él personalmente, sino que fue parte de un plan para dañar y perjudicar al Estado mexicano.
“Mi detención fue parte de un plan para perjudicar a México. No afectará al exsecretario. Afectaron a las Fuerzas Armadas, las ofendieron. Agredieron al Estado mexicano”, declaró Cienfuegos durante una entrevista con Jorge Fernández Menéndez para Adn 40.
Cienfuegos fue arrestado en octubre de 2020 por autoridades de Estados Unidos debido a presuntos vínculos con el crimen organizado. Posteriormente, fue extraditado a México, donde finalmente fue exonerado de los cargos en su contra.
En la entrevista publicada unos días después de que el general volviera a ser objeto de polémica debido a una condecoración, Cienfuegos detalló su captura en un aeropuerto estadounidense, los días que pasó detenido y su posterior retorno a México.
“Fue una injusticia lo que hicieron conmigo. Afectaron a mi familia. A mí me afectaron directamente. No solo a mí, también hirieron a las Fuerzas Armadas”, afirmó el exsecretario.
Cienfuegos recordó que las autoridades de Estados Unidos lo relacionaron con un grupo criminal local de Nayarit debido a mensajes de texto intercambiados entre dos presuntos delincuentes, donde se mencionan a un tal “Padrino” y “El Zepeda”.
Además, aseguró que en su proceso se cometieron muchas faltas, como el no decirle al Gobierno de México que lo estaban investigando.
“Dicen que tres veces nos reunimos el H2 y yo. En una estaba con el presidente de la República, en otra estaba en Piedras Negras inaugurando una estatua, en otra estábamos en Acapulco con los empresarios de Guerrero. Se cae por tierra su versión”, relató.
Finalmente, en sus declaraciones, Cienfuegos expresó su agradecimiento al presidente Andrés Manuel López Obrador por intervenir para facilitar su regreso a México.
“Me dijeron que para ellos era más importante la relación con México que procesar a un general. No admitieron su error (las autoridades de Estados Unidos). He esperaba una disculpa, pero hasta ahora no ha habido nada de eso”, añadió el exsecretario de Defensa.