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LA GUERRA ENTRE ISRAEL Y HAMAS CREA AMBICIONES EN MEDIO ORIENTE. 

El ataque de Hamas contra Israel y el consecuente conflicto en Medio Oriente han tenido un impacto significativo en los aviones de China en la región. A pesar de los esfuerzos del presidente chino Xi Jinping para desempeñar un papel más relevante, la situación actual ha puesto a prueba la capacidad de Beijing para mantener su neutralidad y gestionar las complejas dinámicas en juego.

A pesar de la neutralidad declarada de China en el conflicto, su posición ha suscitado ciertas tensiones con Israel. La incertidumbre creada por el conflicto llevó a la cancelación temporal del viaje del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, a China a finales de octubre. Esta situación ha planteado preguntas sobre la capacidad de Beijing para ejercer influencia en la región y, al mismo tiempo, preservar sus relaciones con Israel y otros actores clave en el conflicto.

Expertos en relaciones internacionales, como Shi Yinhong, profesor de la Universidad Renmin de China, sugieren que la política de Beijing en Medio Oriente se ha visto momentáneamente paralizada por la guerra. La participación directa o indirecta de Estados Unidos, que respalda firmemente a Israel, complica aún más la situación para China.

A pesar de estos desafíos, algunos expertos creen que China podría beneficiarse a largo plazo al fortalecer sus lazos con los países árabes en la región. Al forjar vínculos más estrechos con estas naciones, China podría jugar un papel constructivo en la resolución de conflictos y contribuir al desarrollo económico y político en Medio Oriente. Sin embargo, la evolución de la situación seguirá siendo objeto de atención y análisis en los próximos meses.

El papel de China en el conflicto de Medio Oriente ha sido objeto de atención internacional, especialmente a raíz del reciente conflicto entre Israel y Hamas.

El enviado especial de China para Oriente Medio, Zhai Jun, ha estado involucrado activamente en la diplomacia, manteniendo conversaciones telefónicas con funcionarios palestinos y egipcios. Durante estas conversaciones, Zhai ha sido abogado por un alto el fuego inmediato y ha solicitado apoyo humanitario para el pueblo palestino.

En sus comunicaciones con funcionarios israelíes, China ha enfatizado su posición de neutralidad, destacando que no tiene intereses egoístas en la cuestión palestina. En palabras de Zhai Jun, China siempre ha estado del lado de la paz, la equidad y la justicia, y está dispuesta a trabajar con la comunidad internacional para promover la paz y fomentar las conversaciones.

Por otro lado, el ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi, ha expresado con firmeza su apoyo a los palestinos. Wang Yi señaló que el problema fundamental radica en la falta de justicia para el pueblo palestino, destacando así la importancia de abordar las preocupaciones y aspiraciones de los palestinos para lograr una paz duradera en la región.

La postura de China, que aboga por la justicia y la paz en el conflicto de Medio Oriente, sigue siendo objeto de atención mientras la comunidad internacional busca soluciones para la crisis en la región.

China ha mantenido una postura constante a favor de una solución de dos Estados en el conflicto israelí-palestino, abogando por un Estado palestino independiente. Durante el reciente conflicto entre Israel y Hamas, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, contactó a su homólogo chino, Wang Yi, solicitando que China utilice su influencia en la región para evitar la entrada de otros países y grupos en el conflicto.

Hasta el momento, expertos en política y relaciones internacionales señalan que China está buscando una resolución pacífica para proteger sus intereses económicos y comerciales en Medio Oriente, al tiempo que evita una escalada del conflicto y se presenta como un mediador neutral en la región.